Tuesday 20 May 2014

La sinestesia se disfruta a gotas.


Por favor, ver:



Música de la jaula
A Alfredo Arvelo Larriva

La melodía del sonido
de alegre música de amor,
alegre llega hasta mi oído,
mas suena triste en mi interior.

El ave lirica se encanta
en la armonía de rimar,
con una rima en la garganta
se duerme acaso sin pensar.

El alma en flor de primavera
de su bizarra juventud
se ha marchitado prisionera
como un niño en el ataúd.


Extracto: ‘’La canción recóndita’’
Cruz Salmerón Acosta


  

Hace ya casi tres semanas, el sábado 03 de mayo,  iba en camino a encontrarme con Anny: me bajo del bus, paso el Lía Bermúdez (Centro de Arte, CAMLB)* de repente empiezo a pensar en lo rico que es ir caminando por las vidas de las calles, cuando volteo la mirada y veo esas chaquetas tricolores, pequeñas, llamativas, con estrellas como ojos. Maravilloso, ver los espíritus cantando sin siquiera producir movimiento alguno de sus labios.

Ese día fácilmente podía bajarme del bus antes, y perder el gran episodio que habríamos de vivir luego (digo gran ya que en realidad uno debe de emocionarse por las cosas mínimas y grandes, por igual)  Algo en mi me dijo que me bajase allí, justo en ese preciso momento.

Si las cosas pasan por coincidencia entonces, ¿en dónde dejamos la voluntad del individuo soberano?, si las situaciones pasan por ocurrencia, ¿es que no estamos prestando completa atención a los sucesos?
Llamé  a Anny para que se acercase al Lía, y poder hacer algunas fotos. Mientras tanto, me acerqué a un chamo del equipo de filmación, para preguntar sobre lo que realmente estaba ocurriendo. Su respuesta: filmamos ‘’el sistema’’.  Realmente yo estaba completamente sumergida con y por las risas de los niños, por el amor multiplicado y regalado por el equipo de producción, y por el compañerismo que encontramos en el centro de la ciudad. Tanto así que fuimos extras en el corto, caminando por esos suelos mientras filmaban al famoso 'Chino'.
  


Por primera vez no entro en desconcierto político e intimo (mis pensamientos a veces son tímidos) cuando alguien pronuncia la palabra ‘’sistema’’. Muy pocas veces este término está asociado a movimientos culturales que ayuden con la emancipación del hombre y la mujer; al contrario, los sistemas políticos buscan subyugarte y hacerte caer en las disyuntivas cerebrales impuestas cotidianamente, ejemplo: blanco o negro, socialismo o capitalismo, hombre o mujer, joven o viejo, números o letras, negativo o positivo, por nombrar lo más básico, y puedo seguir, y seguir, y seguir.

‘’El Sistema’’ que ellos estaban filmando, es el Sistema de Maracaibo Centro, la cual está compuesta por la Orquesta Sinfónica Infantil y Juvenil, Núcleo Maracaibo, dirigida a su vez por el Magister Ender Burgos. Esta Orquesta inició sus andares en la música en el año 1977, bajo el director Maestro Juan Belmonte Guzmán, que ejerció su cargo hasta octubre de 1994. Cabe destacar que dicho núcleo fue el segundo en formarse dentro del sistema nacional Juvenil e Infantil (obviamente el primero, fue realizado en Caracas), fundado por el Dr. José Antonio Abreu (1939), en el año 1976.


Según su página web oficial: ‘’El objetivo esencial del Núcleo Maracaibo no se circunscribe al plano artístico, sino que se inserta directa y profundamente dentro del contexto global de una política de prevención, capacitación, autoestima y cultivo de los valores éticos y estéticos vinculados al que hacer musical. De allí su inmensa utilidad en todo lo concerniente a la formación de la personalidad, despertar de mente y desarrollo del trabajo intelectual‘’.


 


Hablemos ahora de: La Fundación del Estado para el Sistema Nacional de las Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela.


Documental, algo viejo, pero relevante:


El Sistema cuenta con una red de al menos 120 orquestas juveniles, y unas 60 orquestas infantiles. El número de estudiantes es aproximadamente 350.000 jóvenes. ¿Imagínense eso? 350.000 niños y niñas, a los cuales finalmente les han brindado la oportunidad de poder desarrollar no solo sus instintos musicales sino su manera de ver la vida también. De estas escuelas han salido personas como Diego Matheuz, Edicson Ruiz y si, Gustavo Dudamel. Representaciones inmensas de la patria, del país, de las tierras, de la bandera. Y lo más sorprendente de todo, es la manera en la cual incluyen a todas las personas. Se encuentran talleres y programas especiales para niños y niñas con discapacidades o dificultades de aprendizaje, uno de ellos: El Coro de Manos Blancas, que ha sido compuesto por niños sordos.

El Sistema se ha ramificado; contamos con la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar,  bajo la tutela de Dudamel, como por ejemplo. También se ha expandido; sistema que ahora es encontrado en al menos 42 países del mundo, basándose y siguiendo el modelo venezolano. Entre ellos están: Argentina, Australia, Austria, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Corea del Sur, Cuba, Ecuador, Escocia, Estados Unidos, Francia, Inglaterra, Jamaica, India, México, etc, etc.

Y como dice el maestro Abreu: ‘’Eso no es el siglo XXII o siglo XXIII, esa es la eternidad’’. Refiriéndose a la creación de un país en el cual la música sea el agua diaria de los niños. Logremos eso con la lectura, con la escritura, con la poesía, con la narrativa, con la fotografía, con la simplicidad de percibir y ser percibido y de  plasmar aquellas emociones observadas y materializar los pensamientos encontrados, desechados o guardados.


Más información por acá;

* Lía Bermúdez: Nace en Caracas, Venezuela  (1930). Reconocida escultora que se ha dedicado a trabajar en esculturas de hierro. Curso en la Escuela de Artes Plásticas de Caracas; posteriormente se radica en Maracaibo  y se matricula en la Escuela de Artes Plásticas de Julio Arraga. Alumna de Jesús Soto.  Su nombre es parte del Centro de Arte de Maracaibo Lía Bermúdez,  espacio que sirve para presentaciones teatrales, exposiciones, museo de Maracaibo, y bueno, un centro de cultura para los de esta parte de Venezuela.  Fue creado como fundación en el año 1990, e inaugurado oficialmente en 1993.

Si quieren ver algunas fotos, acá esta el álbum:


NOTA: Al recorrer las calles llevo conmigo la cámara muy pocas veces, usualmente solo la del celular; aun así no podía dejar de fotografiar la hermosura de la escena puesta ante nuestros ojos. 

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